Otro año más de grandiosas lecturas que se termina pronto. El año pasado realicé un pequeño top 5 pero este 2013 habiendo cumplido por primera vez el reto de 50 libros en un año, mi lista de favoritos se amplía alcanzando un total de diez libros, los cuales presento a continuación sin ningún orden en particular:
- Las brujas de Roald Dahl: Resultó una lectura perfecta para comenzar el año, esta simpática pero macabra historia infantil me hizo rememorar a un autor que conocí cuando era pequeña y de quien ahora he decidido coleccionar todos sus libros porque es simplemente mágico. Hasta ahora en la colección tengo a La maravillosa medicina de Jorge que también disfruté este año y en la estantería me esperan James y el melocotón gigante, Volando solo, Matilda y sus Cuentos Completos (una joyita que lanzó Alfaguara este año). Espero conseguir más de sus libros el año que viene, las obras de Dahl son perfectas para compartir con los más pequeños de la casa e iniciarlos en el maravilloso mundo de la lectura.
- El camino de los reyes de Brandon Sanderson: Una palabra: ÉPICO. Sanderson es para mí un imprescindible, ya me había conquistado con su trilogía Nacidos de la bruma y cuando me introduje en este mundo de 1207 páginas fue un verdadero deleite. Personajes maravillosos, sistema de magia original, historia alucinante y lo mejor, es el comienzo de una decalogía. Es decir, El camino de los reyes es tan sólo una presentación de algo que se va convertir (me atrevo a decirlo) en una de las mejores sagas de fantasía épica de todos los tiempos. El autor ya finalizó de escribir su segunda parte que saldrá en inglés el mes de marzo del año que viene, ¡que emoción!. Y para los amantes de la fantasía que aún no han leído nada del autor, por favor, denle una oportunidad, prometo que no se arrepentirán.
- Los miserables de Victor Hugo: La experiencia de leer este clásico la recordaré con cariño, un mes exacto robándole tiempo al tiempo para concluirla porque justo en ese mes comencé a trabajar y mi precioso tiempo libre se vio recortado significativamente. Pero era tan adictivo y tan hermosa la escritura del autor. Acompañar a personajes como Jean Valjean, Fantine, Gavroche, Eponine en sus alegrías y desventuras. Encontrar en Javert uno de los antagonistas más perfectos de la literatura. En fin, un libro cargado de profundos sentimientos y emociones, una auténtica joya literaria.
- La historia interminable de Michael Ende: Este libro se ha convertido en uno de mis favoritos de todos los tiempos, leerlo fue reencontrame con un autor que yo recordaba de mi infancia por haber leído tan sólo fragmentos de su libro Momo (el cual espero leer completo pronto). Fue sin duda la mejor lectura de este año porque Ende tiene todo lo que yo busco en un autor, esa magia para contar historias, esa imaginación infinita para crear personajes de lo más peculiares y ese mensaje intrínseco que lejos de ser moralista nos enseña los verdaderos tesoros que de verdad valen en esta vida. Leer La historia interminable fue una aventura única que no hubiera querido que se termine nunca. Otro autor de quien al igual que Roald Dahl espero leer todas sus obras porque sus historias son mucho más profundas y van mucho más allá de lo catalogado como literatura infantil.
- La paloma de Patrick Süskind: A través de esta corta novela, el autor convierte una historia aparentemente cotidiana en una perturbadora pero magnífica exploración de la psicología humana. Nos presenta un personaje habituado a una rutina cuya monotonía se ve afectada por un hecho de lo más insignificante y a partir de allí podemos deleitarnos con esa narrativa tan concentrada en el matiz de las sensaciones físicas y mentales que de alguna manera evocan a su gran obra. Es por ello, muy recomendable para los que disfrutaron de El perfume.
- Fahrenheit 451: Otro clásico que sin duda atrae a cualquier buen lector por la temática, ¿quemar libros?, doloroso y terrible. Con este libro descubrí que los libros acerca de sistemas totalitarios que impiden por la fuerza el derecho de libertad del individuo me atrae muchísimo, sobre todo los que fueron escritos años atrás, porque ahora se pueden percibir con miedo, que realmente se están produciendo muchos de los cambios que se predijeron. Aunque corto, Fahrenheit 451 encierra muchas verdades y alertas sobre la forma de vida que la sociedad está eligiendo, el autor tiene un don para narrar de una manera hermosa y con fragmentos geniales.
- Novecento de Alessandro Baricco: Precioso monólogo. Otro descubrimiento de un gran autor en este año, una historia que me ha cautivado y me ha parecido una verdadera delicia. Creo que me repito mucho cuando hablo de la preciosa narrativa, pero es que considero que la forma de narrar es uno de los determinantes para disfrutar a pleno la experiencia de lectura y casi todos mis libros favoritos son de autores que poseen esa esencia única para contar historias y éste no es la excepción. Me gustó tanto que cuando descubrí que tenía una adaptación cinematográfica con el título La leyenda del pianista en el océano, la conseguí inmediatamente y me parece que está a la altura de la novela. Baricco enamora con sus letras, es todo lo que tengo para decir. Este año también tuve la oportunidad de leer un segundo libro del autor: Seda, también recomendable, pero me quedo con Novecento, un gran personaje al que recordaré siempre.
- 1984 de George Orwell: Otra distopía impactante que nos describe un sistema político y social bien estructurado para mantener el engaño perfecto, donde el tan sólo pensar que algo va mal o cuestionar al gobierno ya es un crimen. No existe la privacidad ni en la propia mente. Este autor al que conocí con Rebelión en la granja me vuelve a impactar con su crudeza y a dejar con una sensación de vacio total, porque con él señoras y señores, no existe siquiera la posibilidad de finales felices o al menos esperanzadores. Pero aún así creo que es magistral...el Gran Hermano nos vigila O.o
- 1Q84 de Haruki Murakami: Mi experiencia lectora con este señor es surrealista, si bien es cierto que toda lectura nos transporta a distintos mundos, mientras no finalizo alguna de Murakami es como si no retornara al mundo real, mi otro yo vive con un chip automático pero yo sigo en ese mundo paralelo. Y es precisamente ese dilema el que está presente en esta novela, un perfecto ejemplo del realismo mágico japonés y una obra maestra del autor. La historia de Aomame y Tengo, una historia que transcurre en el año que evoca al clásico de Orwell, pero con sucesos extraños, alejados de la normalidad que provocan que los protagonistas se pregunten si es realmente el mundo real o uno paralelo. Una historia que se disfruta mucho, muchísimo.
- Un mundo feliz de Aldous Huxley: Para completar las tres distopías imprescindibles tuve que introducirme en otro perturbador futuro imaginario en el que incluso la reproducción humana estaría controlada por un estado totalitario, como una simple fábrica de hacer bebés y condicionarlos de acuerdo a la posición social que estén destinados a ocupar. La sociedad ideal donde todos son "felices" porque viven de acuerdo a como los fabricaron, no hay sentimentalismos absurdos y si alguien se pone melancólico para eso está el Soma, la sustancia para que se relajen y se olviden de todo. No es una lectura confortable pero es muy valiosa en su contexto reflexivo.
Y estas fueron mis diez lecturas favoritas del 2013.
También dejo una lista de libros que aunque no entraron en mis favoritos, me gustaron mucho y considero muy pero muy recomendables:
- Coraline de Neil Gaiman
- Cumbres Borrascosas de Emily Brontë
- The Duff de Kody Keplinger
- Jonathan Strange y el Sr. Norrell de Susanna Clarke
- Las mentiras de Locke Lamora de Scott Lynch
- Alcatraz versus the Evil Librarians de Brandon Sanderson
- La importancia de vivir de Lin Yutang (ensayo)
* Peores lecturas: Hubo pocos libros que no me gustaron casi nada por diferentes razones, entre ellos están:
- Cuando dios era un conejo de Sarah Winman: la historia poco profunda que abusa de tópicos, la voz narrativa en primera persona que parecia de una niña adolescente pero en realidad era de una adulta joven me indisponía a continuar la lectura aunque logré terminar el libro no me dejó nada.
- Las ventajas de ser un marginado de Stephen Chbosky: Otro libro que me parece abusa de tópicos relacionados a la adolescencia, es decir, el autor mete suicidio, alcohol, drogas, violación, homosexualidad, etc. pero no profundiza para nada en ninguno de ellos y sus personajes son muy planos, para colmo la voz narrativa me recordó mucho al libro previamente mencionado aunque aquí el protagonista es masculino. Al menos creo que tiene algunos fragmentos bonitos.
- Invisible de Paul Auster: Una historia con la que no me conecté para nada y me pareció de lo más absurda, nunca antes había sentido que perdía mi tiempo con una lectura pero con esta sí que me dió esa sensación.
En conclusión creo que este año tuve un gran balance literario. Espero que el siguiente sea incluso mejor, que conozca nuevos autores, disfrute de los de siempre, me enamore de grandes historias, personajes y conozca muchas más personas apasionadas por la lectura.
¡Feliz año nuevo!
